Desde Huatusco
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ROBERTO GARCÍA JUSTO.
COMO SURGE BACHILLERES.
La incomunicación y las barrancas profundas y misteriosas que rodean y aíslan al Municipio, y la falta de centros educativos eran un obstáculo para que muchos jóvenes no se prepararan ni tuvieran oportunidad de salir de esta población para continuar con sus estudios en otros lugares como Xalapa o la Ciudad de México. No obstante que la carretera Conejos-Huatusco se inauguró en 1948, era difícil convencer a los padres para que dieran su aprobación y embarcarlos a una aventura que no tenía la seguridad de salir adelante.
Siendo un caso especial para paisanos como Martín Cortina Carbajal, profesor y novelista originario de Tlacotepec de Mejía que desafió la distancia y marchó a la capital donde realizó su sueño de obtener el título magisterial. Y en esa lista destaca el famoso caricaturista Ernesto “Chango” García Cabral, que solo llevaba su talento dormido y allá lo fue a despertar. Eugenio Luna Loyo, acuarelista y maestro del esmalte, el Doctor Vinicio Méndez César distinguido por su altruismo demostrado al elegir este terruño para ejercer la profesión.
Con grandes sacrificios lograron cosechar frutos producto de su esfuerzo y constancia como un ejemplo para las nuevas generaciones que continúan con ahínco preparándose para construir un futuro luminoso. Y es que, en esta localidad, en esa época, solamente existían dos escuelas Primarias oficiales. De donde los egresados recibían un Certificado avalado por la Dirección General de Educación del Estado de Veracruz. Otorgando dos becas para que los alumnos elegidos previo examen de oposición, continuara su carrera en la Escuela Normal Veracruzana.
Todas estas inconveniencias fueron analizadas entre personajes de la vida económica política y social de Huatusco. “Comprometidas para la fundación de una escuela preparatoria; así como probables y potenciales alumnos, padres de familia interesados, autoridades en busca de proyección, personas altruistas que buscaron siempre el progreso de la comunidad. Profesionista con espíritu de apoyo y servicio social, todos y cada uno de ellos aportando lo que sus posibilidades les permitían, lograron reunir lo básico para llevar a buen fin ese gran proyecto.”
Estamos repasando unas líneas de esta gran historia que nos regala el profesor Alfonso Hernández Hernández, “Bachilleres Huatusco de 1968 a 1999”. Como alumno y director de este centro educativo, le correspondió afrontar una problemática que muchos desconocemos, pero que con esta descripción minuciosa entendemos a cuantos problemas tuvieron que enfrentar para construir lo que es una opción real que la impulsa para competir a niveles de otras entidades.
Es admirable como nos lleva a reconocer el valor de los que intervinieron de una manera desinteresada para ser posible esta obra educativa. En la lista figura el nombre de don Pedro Pardo Zorrilla de San Martín, emigrante español, dedicado a la producción cafetalera y administrar las empresas de los Ruiz Bello, por lo tanto, basta decir que gozaba de recursos económicos. Don Rafael Guillaumin Fentanes, distinguiéndose por su desinteresado apoyo. Siendo los que como Presidente y Secretario, respectivamente, presidieron el Patronato durante muchos años.
Justo es darle un reconocimiento a la primera planta de Maestro que sin cobrar un solo centavo demostraron su responsabilidad y tesón para consumar esta obra. Baldomero Ramón Mota Benavides, Ramón Castillo Tejeda, Roberto Castro Toss, Enrique Sabitay, Celeste Castillo Moreno (primera directora), Nemesio Cano Vázquez, Nahúm Genaro Solís Heredia, Ramón Q. Peredo, Miguel Montalvo, Blanca Iris Holguín, Gilberto Parissi Lagunes, María Luisa Colorado Alvarado, Benjamín Bernardi, Armando Soto y Marusa Molina de Peredo. Que me disculpen los que faltan, pero estos personajes fueron una base importante para el desarrollo de la educación en el ex Cantón.