Desde Huatusco
3 minutos de lecturaROBERTO GARCÍA JUSTO.
RECORDANDO A LA MAESTRA.
Cada vez que pienso en la mujer pongo mis ojos en su creatividad en su ingenio y una dosis de virtudes que no alcanzo a describir. Algo que el la 8s transforman es el mundo, lo matizan con sus manos y con sus pensamientos llenos de generosas intenciones. En donde quiera que ellas tengan presencia, las cosas más difíciles se convierten en elementos sencillos para beneficio de la humanidad.
Por ese motivo le doy espacio a una maestra que durante su vida trabajo incasablemente para proyectar sus conocimientos en bien de la sociedad huatusqueña. Enriqueta Gutiérrez Hernández, dejó grabada con su puño y letra una poesía dedicada a Huatusco, la que a continuación ponemos ante sus ojos para apreciar lo infinito de su composición.
¡Eres Huatusco hermoso, un verdadero ensueño ¡
inspiración profunda son tus amaneceres
y ante el límpido capelo de tu cielo,
Un viento suave susurra plácidos atardeceres.
¡ciudad antigua, resguardada por enormes cerros
como el Acatepec, Ixpila y el de Guadalupe,
el Pico de Orizaba, nevado volcán que esculpe
entre los cañaverales, zarzamoras y cafetos ¡
Una verde y matizada llanura siempre te engalana
con flores multicolores que, en la mañana,
dejan aroma las gardenias, dalias y jazmines
en praderas orquestadas por chicharras cantarinas.
Por eso acuarela de embrujo siempre pareces,
paraíso alegre y bullanguero así eres,
que guarda gran misterio en tus leyendas
y en tu historia, contrastes fascinantes tienes ¡
Es lugar donde la poesía de provincia surge
y donde suele volverse bello lo grotesco,
aún de los obscuros desengaños que muchos hieren
curando los dolores con tu aire fresco ¡
Paisaje sutil que guardas mis recuerdos
y mis noches de soledad…pasajeras ¡
hasta la llegada de nuevos soles
que tímidos alumbran mis quimeras ¡
Por ello evoco siempre con nostalgia tus neblinas
que acarician y besan suavemente las calles,
haciendo así surgir el pensamiento y lira
en la inspiración de tus muchos artistas ¡
En tus empinadas calles adoquinadas luces
coloniales casonas llenas de macetas con flores,
donde enredaderas cubren las románticas rejas
mientras en los tejados húmedos de musgo cubres ¡
Aquí digno de los dioses precolombinos han sido
chicatanas, tlatonile y de izote las flores,
preparados en sabrosos y variados platillos
que sazonan con amor tus hacendosas mujeres ¡
En el parque, el tenue crepúsculo forma
amorosas siluetas de las jóvenes parejas
que con toda ilusión su vida así forja,
entre las románticas luces de tus faroles ¡
Es así como el amor nace ante estrellas,
para los enamorados que han dejado huella
en tus jardines, con tiernas promesas e ilusiones
iluminados por cocuyos sus henchidos corazones ¡
Quiero, por lo tanto, cuando yo muera,
descansar en tus húmedas praderas,
cuajadas de flores y perfumadas gardenias, bañadas por la bella luna ¡en primavera ¡.